Benvid@s a Auladiver, o blog de Pedagoxía Terapéutica do CEIP A Rúa (Cangas), un espazo aberto e dinámico que aposta polo valor da diversidade.

viernes, 26 de abril de 2013

LaTristeza y la Furia

En esta actividad intentamos reflexionar sobre la gestión de las emociones, utilizando el siguiente cuento (adaptado de Jorge Bucay):

 LA TRISTEZA Y LA FURIA 

En un reino encantado donde los hombres nunca pueden llegar, o quizás donde los hombres transitan eternamente sin darse cuenta... 

En un reino mágico, donde las cosas no tangibles, se vuelven concretas... 

Había una vez... un estanque maravilloso. 

Era una laguna de agua cristalina y pura donde nadaban peces de todos los colores existentes y donde todas las tonalidades del verde se reflejaban permanentemente...

Hasta ese estanque mágico y transparente se acercaron a bañarse haciéndose mutua compañía, la tristeza y la furia. 

Las dos se quitaron sus vestimentas y desnudas las dos entraron al estanque. La furia, apurada (como siempre está la furia), urgida -sin saber por qué- se baño rápidamente y más rápidamente aun, salió del agua... Pero la furia es ciega, o por lo menos no distingue claramente la realidad, así que, desnuda y apurada, se puso, al salir, la primera ropa que encontró... 

Y sucedió que esa ropa no era la suya, sino la de la tristeza... Y así vestida de tristeza, la furia se fue. 

Muy calma, y muy serena, dispuesta como siempre a quedarse en el lugar donde está, la tristeza terminó su baño y sin ningún apuro (o mejor dicho, sin conciencia del paso del tiempo), con pereza y lentamente, salió del estanque. En la orilla se encontró con que su ropa ya no estaba. 

Como todos sabemos, si hay algo que a la tristeza no le gusta es quedar al desnudo, así que se puso la única ropa que había junto al estanque, la ropa de la furia. 

Cuentan que desde entonces, muchas veces uno se encuentra con la furia, ciega, cruel, terrible y enfadada, pero si nos damos el tiempo de mirar bien, encontramos que esta furia que vemos es sólo un disfraz, y que detrás del disfraz de la furia, en realidad... está escondida la tristeza.





Arán y Yoel os cuentan lo que hicimos: 

"En esta actividad trabajamos un texto en el que aparecía un lugar donde las cosas irreales se convertían en tangibles. Un día la Tristeza y la Furia se iban a bañar a un estanque. La Furia salió rápidamente y cogió la ropa de la Tristeza. Más tarde la Tristeza salió y cogió la ropa de la Furia.
Este texto se trabajó en 3 sesiones. En la primera, Rosana nos leyó el texto y tuvimos que responder individualmente a algunas preguntas. En la segunda formamos grupos, pusimos en común las respuestas y contestamos juntos a más preguntas. En la última comentamos lo que hizo cada grupo con el resto de la clase y descubrimos que casi ningún grupo había entendido bien el texto.
Este trabajo nos hizo pensar mucho y descubrimos que cuando estamos tristes no queremos que nos molesten y, si lo hacen, nos cabreamos por nada"